letras comas puntos acentos palabras, frases párrafos y libros.

Yo te hablé de libros que parecían para mi lo más importante y lo mejor que nunca había leido, yo te hablé de libros que según mis palabras indicaban no tener final, yo te hablé de libros que al acabarse se llevaban con ellos a la estantería de mi cuarto, una cuarta parte de toda la sabiduría que me aportaron,y la mitad de la reflexión que obtuve de él y al cerrar las hojas de un golpe se partieron en dos.  Yo te conté las hojas y su olor a viejo cuando los encontraba en alguna estantería perdida de la biblioteca de la ciudad a la que nadie piensa demasiado en hacerle una visita al menos para recordarle o pedirle que no se olvide que todavía hay quien piensa en ella y en los libros que se quedaron en el estante sin leer desde su día de llegada. Yo fui quien apagó el reproductor de música para abrir el de sueños que estaba entre un libro de 500 hojas y en uno de 120, aun que nunca fui partidaria de ilusiones, pero ellos no pudieron evitar que me imagine todo lo que deseaba .Y también fui yo quien fue mojando con lágrimas de no entender o entenderlo demasiado cada párrafo en cada hoja que pasaba, y no te olvides que también estuve implicada en el método de olvidar sin hierbas ni alcohol, de aprender a desentender como perjudicarse y me metí a vivir más allá de frases que gente con 'vida' o sin ella utilizaba solo para estados en redes sociales; pero como aún así los libros me enseñaron a hablar sin miedo de ser ignorada o juzgada por gente que jamás probó el olor y el tacto de decir este fue mi libro y esta es mi página con mi párrafo y la frase de mi vida,admito que en ningún momento me pareció mal eso de meterte mierda de hierbas en el cuerpo para sentir la vida un poco más ligera si no te enseñaron a apreciar el silencio de palabras de alguien que tiró su tiempo y arriesgó la vida al vacío para vivir de que gente como yo vivamos de sus libros.

Y mitad del mundo podría,si supieran de esta confesión, juzgarme de hipócrita por tachar o dejar de tachar hábitos ajenos y podrían llamarme perturbada u obsesa de hojas que solo te cuentan sueños o miedos del resto quien siente como yo, pero solo cuando lees algo que te ha capturado y has sido capaz de encontrar la esencia de una palabra que para el resto es eso, una palabra, aprenderás que hay algo más alla de tapaderas viejas y un taco de hojas que parecen sin sentido.